A los reclamos la directora de la forma más amable y con cierto nivel de frustración me respondió. En la anterior administración se compraron candados de no muy buena calidad y que con el paso del tiempo una parte se dañaron y otra se los han robado, dejando a la biblioteca tan solo con la mitad de capacidad de lockers, lo cual desestimula el uso de la misma. A este punto la directora me manifestó que desde hace dos años viene proponiendo el sistema utilizado en la biblioteca Luis Ángel Arango, que consta de lockers accionados con monedas que devuelven la misma al salir el estudiante, pero las diferentes administraciones rechazan el proyecto por el costo de aquellos lockers, que están alrededor de 50 millones de pesos, lo cual me parece es una falta de visión , pues ello en verdad seria una inversión de largo de plazo que daría calidad a la biblioteca.

El otro tema tocado en la charla fue el de la caída recurrente del sistema de la biblioteca que nos permite agendar las búsquedas y la pedida de material bibliográfico. A esto respondió que la evaluación del sistema está realizada y que falta la asistencia de los ingenieros de la universidad y el otorgamiento de recursos para su actualización o cambio. Una vez más la falta de una buena administración entra en detrimento de la calidad académica de la universidad.
Finalmente le pregunte que porque no había vuelto a ver El Espectador en la biblioteca a lo cual respondió, La biblioteca pidió la suscripción y el periódico llego por un tiempo de seis meses hasta que un día dejo de llegar y la biblioteca reclamo al periódico y este respondió diciendo que la universidad nunca pago la suscripción por lo que no se entregaría más ejemplares y que si querían una nueva suscripción la universidad tenía que pagar los ejemplares ya suministrados y el valor de la nueva suscripción. A lo cual la universidad no tiene respuesta.
Para concluir veo que el hacer un simple reclamo me llevó a ver de primera mano la precaria situación de la universidad en términos administrativos y académicos. En este marco veo que es esencial unir a los estudiantes, en primer línea en torno a nuestra representante al comité de Biblioteca la compañera estudiante de historia Ima Poveda, que hasta el momento después de un poco más de un mes de gestión lo hace bien, pues hoy está en la tarea de reunir todas las guías de cátedra de todos los programas académicos de la universidad con el fin que se realice un cruce entre el material de la biblioteca y el trabajado por el docente, este tiene el fin de pedir el material faltante y que se cuente con el número adecuado de ejemplares. En esta tarea no podemos dejarla sola. Incluso debemos apoyar a la directora de Biblioteca en los proyectos que estén encaminados a dotar de calidad y de cubrimiento a la biblioteca, recordemos que de esta depende parte de la acreditación institucional de la universidad.
Pdta. La biblioteca no tiene servicio de teléfono hace un mes.
Andrés Rojas
Presidente del Consejo Superior Estudiantil
Estudiante de historia de la Universidad Autónoma de Colombia
@AndresRojasGb